Como un freno injustificable a la reactivación del turismo y un duro golpe a la recuperación de las aerolíneas califican desde los gremios del turismo las discriminaciones que imponen una serie de medidas contempladas por el Ejecutivo en el Plan Fronteras Protegidas.
Inquietud que la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), la Asociación Chilena de Aerolíneas (Achila), a Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) y la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC) han expresado por separado al gobierno, pero que ahora lo hacen en conjunto ante lo que consideran medidas arbitrarias, discriminatorias y que no se justifican desde el punto de vista sanitario.
Y lo que demandan los gremios al Ejecutivo es comprensión y sensibilidad con el sector más golpeado por la pandemia, y que tras más de un año y medio prácticamente paralizados, requiere con urgencia iniciar su recuperación. Sobre todo, en momentos que las cifras de la pandemia han mejorado de forma importante, debido principalmente a que Chile ha logrado vacunar al 80% de la población mayor de 18 años, siendo uno de los tres países que más avances exhibe en el proceso de inoculación.
En este actual contexto sanitario, los gremios emplazan al gobierno a establecer criterios y condiciones claras que se deben cumplir para poner fin a las restricciones del Plan Fronteras Protegidas, al igual como se está haciendo para determinar en qué zonas del país se reduce el horario de toque de queda. En esa línea, las entidades gremiales remarcan la importancia de volver a una nueva normalidad considerando todos los aprendizajes que ha entregado la pandemia, como es respetar las medidas de autocuidado, seguir promoviendo la vacunación a nivel nacional y fomentar la responsabilidad de cada uno de los chilenos.
“DISOCIADO DE LA REALIDAD”
Al respecto, las cuatro entidades califican el Plan Fronteras Protegidas de “discriminatorio, confuso y disociado de la realidad”, ya que menoscaba el derecho a la libre circulación de las personas; impide salir del país a los menores de edad sin pase de movilidad; discrimina a las personas que viven en zonas más distantes o extremas de Chile, al exigir la permanencia en hoteles de tránsito (durante 10 días) a quienes se encuentren a más de cinco horas de Santiago en transporte terrestre; y no permite el ingreso al país de extranjeros no residentes vacunados.
A su vez, dicen tener la convicción de que es posible reactivar la economía, el turismo, y las fuentes de trabajo, de forma segura, y al mismo tiempo lograr el reencuentro de los chilenos en un contexto en que el Covid-19 pasará a ser parte de la vida cotidiana. Por ello, es fundamental, aseguran, que la autoridad fije criterios objetivos, en términos sanitarios, para definir cuándo se pondrá términos a las restricciones impuestas por el mencionado plan.
DIRECTIVOS
En esa línea, Ricardo Margulis, presidente de Fedetur, indicó que “considerando las actuales cifras sanitarias del país, no existe justificación para las restricciones que impone el Plan Fronteras Protegidas, entre otras, abrir las fronteras sólo a quienes salgan del país, y no a los extranjeros que quieran visitarnos y cuenten con su proceso de vacunación completo. La industria del turismo tiene la imperiosa necesidad de reactivarse y el turismo receptivo es fundamental en esa ecuación. Por lo mismo, hacemos un llamado al gobierno a terminar con esta discriminación injustificable y permitir el ingreso de visitantes internacionales al país, ya que el sector cuenta con protocolos sanitarios de alto estándar para garantizar una experiencia segura”.
Por su parte, José Ignacio Dougnac, presidente de Achila, enfatizó que “es imprescindible poder restablecer el derecho de movilidad de las personas de manera segura y para eso, es necesario establecer medidas justas, no discriminatorias, que permitan a todos viajar bajo los mismos criterios y que puedan volver a conectarse con sus seres queridos después de tanto tiempo. Con las medidas que rigen actualmente, las personas que viven en regiones son las más perjudicadas, ya que injustamente deben asumir más costos que las personas residentes en la Región Metropolitana, así mismo, los niños deberían tener la libertad de viajar con sus familias”.
En tanto, Gabriela Peralta, country manager de IATA, señaló que “nos llama la atención que las medidas del Plan Fronteras Protegidas tengan un carácter discriminatorio, no sólo para los ciudadanos del país, sino también para los extranjeros y las familias con niños menores de 12 años. Y la pregunta que nos hacemos es ¿qué debe ocurrir en Chile para que sus ciudadanos y residentes puedan ejercer libremente su derecho a salir del país y regresar? ¿Por qué siendo Chile un país con la tasa de vacunación más alta en nuestra región se convierte en el país con más restricciones a nivel mundial? ¿Buscan erradicar el COVID-19 para volver a abrir las fronteras? Creo que es tiempo de adecuarnos, entre todos, como lo están haciendo muchos países y aprender a convivir con el virus”.
Finalmente, Ricardo Mewes, presidente de la CNC, manifestó que “debido al alto nivel de vacunación que ha logrado nuestro país, necesitamos que la autoridad establezca parámetros objetivos para tener claridad sobre cómo seguir adelante y volver a abrir las fronteras. Recordemos que hoy, después de más de 20 meses de crisis, la industria turística necesita reactivarse urgentemente para levantar a las empresas y generar nuevamente empleo y crecimiento, que es lo que el país necesita”.
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